Sentirse apoyado
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- Publicado: Jueves, 21 Marzo 2013 20:00
El baloncesto es un deporte de equipo, en el que sólo se triunfa si se juega en equipo. Por eso os aseguro que los peores momentos que he vivido en este deporte, que afortunadamente han sido muy pocos, han coincidido con momentos de soledad, de no sentir el apoyo ni la confianza de los que me rodeaban. Todos necesitamos sentirnos apoyados, ver que nuestro trabajo es valorado por los demás, sentir que confían en nosotros.
Es muy fácil caminar hacia delante cuando las cosas van bien, cuando nadie duda de nosotros y nuestro trabajo, cuando los resultados nos favorecen. Ya lo dice el refrán: "la victoria tiene muchos padres, mientras que la derrota es huérfana". Pero es en los malos momentos cuando se necesitan de verdad las palabras de apoyo, las palmadas en la espalda.
Todos hemos visto a ese jugador que tiene una mala racha de partidos, que no consigue realizar su juego, a quien le falta confianza en si mismo. Sin duda necesita de los compañeros para que le animen, para que le hagan ver que cuentan con él, que es muy necesario para el equipo, ya que nadie podrá desempeñar su rol en el grupo. En ocasiones nos equivocamos poniendo en duda sus minutos de juego, exigiéndole lo que en ese momento no puede aportar, no perdonándole los fallos. De esta manera no conseguiremos que levante la cabeza, sino que le ayudaremos a que reste cada vez más.
Pongámonos en la piel del entrenador cuando los resultados no son los esperados, cuando no encuentra soluciones y nota que el equipo se le va de las manos. Qué fácil es, en ese momento, dar consejos, o lo que es peor, criticar desde fuera. Pero con eso no ayudamos, o quizás si, pero a hundir más el equipo. Es en ese momento cuando los jugadores deben mostrarle que están con él, que el equipo va a salir a flote, y lo va a hacer con el esfuerzo de todos. Los que ven los toros desde la barrera, sin implicarse, no corren el peligro del fracaso, pero tampoco sentirán nunca la satisfacción del trabajo bien hecho.
Estamos en el momento decisivo de la temporada, en el que pequeños detalles nos harán triunfar o fracasar. Apoyémonos unos a otros para luchar por un mismo objetivo.